jueves, 15 de febrero de 2018

Libros

Nada mejor en épocas de frío y tempestades que "abrigarse" con la lectura de alguno de esos buenos libros que pacientemente esperan en los estantes a ser, un buen día, los escogidos para tal fin. Apretados entre sí, las más de las veces, quien sabe si por algún tipo de ósmosis no se produce entre ellos un trasvase de información que se nos escapa al resto de los mortales. Temeroso de que así pueda ser, siempre acostumbro a  colocarlos, una vez leídos, en su mismo sitio para que si ello fuese cierto, puedan regresar junto a sus compañeros de aventuras e informarles de la nueva vivencia experimentada.