sábado, 25 de julio de 2020

Casualidades...

No me apetecía mucho esperar a que el cometa Neowise volviese a acercarse a la Tierra dento de 8.600 años así que fuí con mis amigos Manuel y Gustavo hasta el Gamoniteiru para fotografiarlo. La casualidad quiso que en una de las tomas que hice, a seis segundos de exposición, un avión pasase con una trayectoria bordeando la osa mayor por "encima" y su rastro lumínico quedase impresionado en mi fotografía eclipsando casi al cometa que aparece pequeño, abajo a la izquierda. ¿a dónde se dirigía? ¿quiénes eran sus tripulantes y pasajeros? ¿estarían éllos viendo también el cometa desde su privilegiada posición?... Son preguntas sin respuesta fruto de una más de las casualidades que se dan en nuestra vida.